Muchas veces el ser feliz es más sencillo de lo que parece. Pero de tan sencillo parece que es tremendamente difícil.
Contar hasta diez, o al contrario, lanzarte sin pensar.
Te sabes la teoría. Nunca la recuerdas. Nunca la llevas a la práctica. Pero el día que consegues recordar esa serie de normas..
Ojalá nunca sea demasiado tarde.
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